Los mejores lugares donde comer en Salta

Caminando por la calle Vicente López se puede ver desde su vereda el pintoresco patio de Viracocha, un restaurante donde vas a encontrar la mejor comida andina, ofrece platos suculentos y cerveza artesanal con mesitas en diferentes salones y al aire libre.

Si visitas este resto, vas a encontrar las clásicas empanadas salteñas con mucho jugo, cuidado cuando las muerdas, atento a no mancharse! Las más populares son las rellenas de carne cortada a cuchillo, de pollo o de humita. Todas tienen huevo duro, especias y las podes saborear al horno o fritas.

Viracocha tiene unos bellos murales que adornan su patio, también hay diferentes salones en la casona decorados y ambientados con un estilo auténtico.

Este restaurante está muy bien catalogado por su excelente servicio de mesa, su gastronomía variada y por el ambiente tradicional que es acompañado por espectáculos de música folclórica y andina.

Antes de comenzar por el plato principal, te recomiendo las siguientes entradas: Las humitas con choclo (maíz), las cazuelitas de estofado de cabrito, la sopa de quínoa o los pinchos de cabrito al adobo.

Un clásico de Peña La Soñada es acompañar las entradas con un clásico amalaya salteño (vino tradicional de Salta).

Los sabores de La Criollita son variados, las más populares son las empanadas de queso y de humita. Pero también tienen otros gustos muy ricos como la de calabaza con queso, brócoli o espinaca con salsa blanca.

Además de empanadas, se puede comer locro, guaschalocro (choclo, carne, panceta y legumbres), tamales, humitas y otras comidas tradicionales de la provincia. 

Es otro clásico salteño a la hora de buscar las empanadas más ricas, pero aquí sólo venden empanadas de carne (cortada a cuchillo, las más populares), pollo y queso. Son pequeñas pero exquisitas.

El lugar tiene su mística, ya que se encuentra oculto sin cartel que lo anuncie por fuera y por dentro paredes sin terminar. Tiene más de cuarenta años, un dato a tener en cuenta es que siempre hay largas filas, ir con tiempo!  

Don Salvador cuenta con un salón amplio con un diseño elegante con detalles en madera, está rodeado por ventanales que dan a sus patios.

Entre los platos más solicitados se encuentra el lomo de ternera al vino blanco relleno con ajo, el salmón asado con salsa de palta o el pacú al asador con papas al horno y verduras salteadas.

Para potenciar más los platos acompáñalos con un exquisito vino tinto salteño Tukma.

La carta en Meet es más sofisticada, vas a poder encontrar platos como el ceviche de salmón, mollejas confitadas y todo con un toque regional, como sus empanadas de quínoa y queso de cabra.

Además si sos fan de la coctelería de autor, tienen una buena selección de vinos salteños.

Meet es relativamente nuevo, abrió en el 2019 pero no deja de sorprender a sus comensales con los platos exóticos de su cocina, además de su ambiente moderno y sofisticado.

Este es un restaurante vas a encontrar varias propuestas  gourmets, especializadas en lo que ellos denominan “cocina de altura”, lo que entraría en la categoría de cocina andina con énfasis en sabores e ingredientes precolombinos como la llama, el trigo morado, la quínoa y el amaranto.

Entre los platos que te recomiendo probar está el carpaccio de llama, las truchas de los deshielos de Yala y el medallón de cabrito. También tienen una lograda carta de vinos con viñedos de más de dos mil metros de altura. 

Balcarce funciona en una casa reciclada de siglo y medio, en la esquina de Mitre y Necochea (centro de la ciudad). La carta fue diseñada por su dueño, el chef Claudio Otaegui (dueño también del restaurante de cocina andina Viracocha con sede en Salta y Cachi).

José Balcarce fue fundado hace doce años por el chef Abelardo “Lalo” Angelina y fue pionero, impulsor y referencia de la cocina andina del siglo XXI en el norte argentino.

Es la parrilla más popular de Salta, está ubicada en el centro de la ciudad.  Es uno de los asadores más buscados por quienes visitan este destino, ya que cuenta con platos elaborados de carne vacuna, cerdo y diferentes pescados. Se puede comer al aire libre en sus jardines o sino adentro en el salón.

Los platos son abundantes y algunos días hay música en vivo (tradicional de la ciudad).

A la hora de elegir qué comer de su carta, las mejores opciones son: el pacú a la parrilla con salsa criolla, el famoso bife de chorizo y un atrayente entrecote.

Para los que dejan espacio para el postre, les recomiendo el tiramisú y su singular flan con dulce de leche o crema.

Está a unas cuadras del centro pero vale la pena llegar a la La Candelaria para disfrutar de las mejores carnes argentinas y el folklore de Salta.

Ambientada en una vieja casona colonial con habitaciones remodeladas, patio y galería con mesas.

A la luz de las velas se vive un ambiente muy especial que combina excelente comida regional al son de las chacareras y las zambas.

Se pueden disfrutar: empanadas, parrilla (tira de asado, lomo, vacío, costillar, achuras, chorizos, morcilla, entrañas y colita de cuadril), humitas, cazuela de cabrito, locro y el postre de la Candelaria, la torta salteña y el mix de dulces con quesillo.

Una parrilla con bastante presencia de turistas, ya que se encuentra a pocos metros de la céntrica Plaza 9 de Julio. Cuenta con cocina a la vista y barra de tragos y postres.

El menú es bastante amplio, pero sin dudas el fuerte de Doña Salta es su asador y parrilla. Entre las carnes más llamativas se encuentra el cabrito y el conejo. Aunque los clásicos cortes argentinos como el lomo, entraña y costillar son de los más solicitados.

Mientras esperas tu parrillada, te recomiendo ir pidiendo como entrada las populares empanadas salteñas hechas al gran horno de barro o las empanadas de charqui (una especialidad salteña que es carne secada al sol). Otro punto a favor es que tienen una carta apta para celíacos.

Doña Salta es una casona ubicada frente a la Iglesia San Francisco, en pleno corazón del centro histórico. Tiene un patio imperdible y una ambientación muy bonita. Los mozos están vestidos de gaucho y son muy amables.

Otra recomendación es llegar siempre temprano tanto al mediodía como a la noche porque suele llenarse.

La carta es variada en pastas, podes encontrar panzottis negros de salmón rosado, sorrentinos negros de camarones y ñoquis de papa con salsa de camarones. Si querés sumar otro plato estrella, te recomiendo como entrada o acompañamiento la provoleta de cabra con panceta. Un manjar!

Para potenciar los sabores de estos platos acompañarlos con un vino blanco chardonnay.

El restaurante es cálido y tranquilo, se destaca el sabor casero y la producción a la vista. Es recomendable ir con tiempo porque se arma fila para entrar.

Buscas un lugar para comer pasta casera y 100% italiana? Entonces Mamma Mia es el lugar. Para arrancar te ofrecen una entrada, la popular mini pizza.

Luego podes seguir con la variedad de platos principales como los canelones, ñoquis, lasañas, pastas rellenas y espaguetis. 

Los platos estrella son: los crepes de humita o espinaca, el combinado de la Mamma (ravioles, spaghettis y sorrentinos con salsa boloñesa) y la lasaña de carne y espinaca.

Para los que buscan algo dulce, un must es la cheesecake de frutos rojos o el dulce de cayote con quesillo, nuez y un turrón salteño.

La Fogata tiene una amplia carta que abarca todo tipos de platos, pero se destacan por las sabrosas pastas rellenas. 

Dentro del menú te aconsejamos pedir los sorrentinos de queso de cabra con salsa de verduras salteadas o los ñoquis de ricota con salsa de salmón ahumado. 

Si querés cerrar la comida con un rico postre, pedí el tradicional panqueque con dulce de leche o manzanas al rum!

Ma Cuisine te propone platos para todos los gustos con el incomparable toque de la gastronomía típica francesa. El menú se renueva continuamente.

Canastitas de salmón ahumado, calamares rellenos con morcilla, cazuela de langostinos al ajillo, torrejitas de zapallo con huevo o los deliciosos creps de hongos son algunos de los platos estrella de Ma. Cuisine.

Además, tienen una destacada vinoteca, donde podes encontrar las tradicionales bodegas salteñas como: Tukma, Bad Brothers, Tacuil, Finca Notables y San Pedro de Yacochuya.

Decir "Salta" es casi sinónimo de decir "empanadas”, son dos palabras que van muy unidas. Así que no te vas a cansar de probarlas porque hay muchas variedades y todas son riquísimas.

En Rincón Gourmet las tradicionales son de carne, queso o charqui (una carne típica del norte que se estaciona en salmuera al sol). El secreto de este local ubicado en una tradicional esquina de la ciudad es que saben cuál es la temperatura adecuada del horno para que salgan exquisitas y listas para disfrutar con un vaso de vino de Cafayate.

Te recomiendo disfrutar estas empanadas deliciosas con la salsa picante de la casa, le da un toque especial!

Adelina se encuentra en el paseo Balcarce, una calle peatonal en donde hay varias peñas y restaurantes tradicionales. El restaurante es amplio y bien iluminado, tiene un menú variado de carnes tradicionales y alternativas como llama y conejo. También ofrecen cocina para celíacos y una carta en inglés para los que deseen mayor detalle de los platos. 

Entre las entradas estrellas, te recomiendo probar: los bifecitos fritos de pacú, las costillitas de cerdo con barbacoa y miel o las tradicionales empandas salteñas de carne o cebolla.

En Adelina se arman shows musicales de folklore, ideal para los que quieren disfrutar de la cultura musical de Salta.

En Greeners vas a encontrar los desayunos, brunchs y almuerzos más ricos y 100% veggies. Cuentan con menú para veganos, vegetarianos y celíacos.

Las comidas estrellas son: el salteado de verduras con peras y papas horneadas, los pancakes salados y dulces, los revueltos de huevos orgánicos y para los que buscan algo dulce tienen unos bowls con granola y frutos de estación que son riquísimos y muy frescos. 

También están las medialunas rellenas con dulce de leche y cubiertas con semillas de girasol. Estas dos últimas opciones las podes acompañar con pan de salvado, mermeladas caseras o guacamole.

Otro must de Greeners son sus licuados de frutas, el de frutos rojos es una delicia.

En Chirimoya tienen una gran variedad de platos veganos y gourmets!

Los platos estrella son: la lasaña vegana, el lomito de quinua con papas al horno, el wok coya, las berenjenas a la napolitana con verduras grilladas, la ensalada de cinco colores y la ensalada de quinua

La atención y servicio es de los mejores, son cálidos y toman todos los pedidos con bastante rapidez.

Cocina tradicional, muy cuidada y elegante. El menú es abundante y cuenta con carta para veganos y celíacos. Los platos estrella son los panzottis de aceitunas negras y muzzarella con salsa de hongos de pino, la ensalada de hojas verdes Caseros, los sorrentinos colorados y la quinoa Burger (Hamburguesa de quinoa y remolacha con colchón de palta)

También tienen variedades de ensaladas, sopas y tartas veganas. Y si te quedaste con ganas de algo dulce la Copa Caseros seguro te gustará, tiene helado, merengue y frutillas!

La carta es simple, con todo rico y recién hecho durante todo el día. Cuenta con mesas al aire libre con vista al Convento de San Bernardo.

Tienen una interesante variedad de granos de café que los muelen en el momento.  

Lo mejor: el café colombiano y las mermeladas caseras. Los tostadones son un must a toda hora. También te recomiendo acompañar tu café con la torta de rogel o si vas por un brunch, el budín de pan.

En una calle ancha y arbolada de la ciudad se encuentra Santa María Café. La cafetería es una casa amplia, con techos altos y paredes de ladrillo a la vista, que te recibe con flores frescas en cada mesita.

Es un lugar canchero con una gran variedad de cafés y tamaños, los más recomendados son el capuccino, el americano y el smoothie. Tienen todo tipo de comida dulce y salada y ofrecen una excelente atención.

En las paredes del local exhiben obras de artistas locales que van cambiando con diferentes exposiciones. La muestra actual es de la artista salteña Laura Asaro.

Lo mejor de Santa María es el brunch con tostadas de pan de campo, palta, huevo poché, café con leche y ensalada de fruta. Y si preferís una opción más energética, también hay yogur con granola y fruta, que es ¡una delicia total!

En una esquina sobre el bulevar del Paseo Güemes (el nuevo polo gastronómico de la ciudad) se ubica Café del Tiempo, que se caracteriza por ser una casa reciclada con mucha onda, por sus deliciosos cafés de la casa y por su cocina de autor.

Te recomiendo a la hora de elegir tu café ir por las siguientes opciones: machiatto, creme, bombón, moca o black.

En cada rincón donde uno pone la mirada se sorprende por encontrar un buen mueble de época reciclado junto a libros que fueron dejados por viajeros.

Un momento ideal para visitar este café es durante el atardecer acompañado de una rica infusión.

Una parada obligada para los amantes del vino, tienen una amplia colección de vinos que vos mismo podes elegir de los estantes del bodegón. Cuentan con un asesoramiento muy bueno y precios atractivos para los que quieren llevar un regalo o tomar un vino de buena calidad.

Vas a encontrar la mejor selección y distintas variedades de tintos, blancos, rosados, espumantes y orgánicos. 

Además, en su catálogo ofrecen cervezas (negras, rubias y rojas), aperitivos (Fernet, Vermouth, Triple Sec Citric) y bebidas espirituosas como Brandy, Gin, Ron, Whisky, Vodka y Pisco. 

Eso no es todo: También podés disfrutar de tu vino en el lugar y acompañarlo con una rica tabla de quesos y fiambres o unas deliciosas empanadas salteñas, además cuentan con otros platos riquísimos y bien caseros.

En Borra y Vino también vas a encontrar las cepas tradicionales de Argentina: el Mabec (el más elegido), el Cabernet Franc y el cabernet Sauvignon. Aunque vale la pena probar las demás variedades de tintos y blancos: Blend, Pinot Noir, Tempranillo, Syrah, Bonarda, Petit Verdot, Sangiovese, Chardonnay y Torrontés.

También se puede comer en el lugar, sirven platos tradicionales como guisos, tamales, quesillos y tortillas. 

Mucho más que una peña. La Casona del Molino es un encuentro auténtico con el folklore de Salta. Los artistas ocasionales llevan sus guitarras y bombos y se “arma” el espectáculo allí.

No son shows que siguen un guion, las personas presentes se unen a la peña para disfrutar del baile y la música. Es una experiencia muy distinta a las peñas tradicionales.

La visitan muchos salteños que aman el folklore de Salta, suenan las canciones tradicionales así como las mejores canciones de Los Nocheros, El Chaqueño Palavecino, Los Huaira etc.

Es una casona colonial del siglo VXIII, sus amplias habitaciones decoradas con objetos de época: lámparas, cuadros, piano y muebles remontan a aquella época. Tiene paredes de adobe y pisos de cerámicas rústicas, las mesas se disponen en estas habitaciones y de igual manera en el patio. El patio tiene su encanto, está al aire libre, al lado de la higuera y el asador.

Aquí se pueden comer las empanadas más ricas de Salta, están realizadas con la receta típica; la carne cortada a cuchillo y con condimentos de los valles. Otras comidas recomendadas son el estofado de cabrito, las papas andinas y los tamales.

Para el postre, el mix de dulces con quesillo es una exquisitez que sólo se ofrece aquí, y otro imperdible es el turrón salteño con dulce de leche!

Grizzly es un bar con música en vivo, donde vas a encontrar un ambiente de gente jóven, cuentan con una barra enorme con variedad de tragos y, lo más importante, el escenario donde cada semana, de miércoles a domingo, diferentes grupos de jazz, pop y rock & roll tocan en vivo. 

Es ideal para salir a tomar un rico trago y escuchar buena música, y conocer personas con buena onda!